Por: Marcela López
Todo empezó esperando la llegada de los chicos al
aeropuerto. Llegué una hora antes de la llegada de Beau (el vocalista); pronto
se acercaba la hora, así que fuimos a la parte de llegadas internacionales para
recibirlo. Lo vimos pasar… ¡pero no salía! Se quedó adentro esperando a los
demás.
Ahí estábamos todas, con calor, yo un poco enferma, todas
desveladas… Pero el hecho de verlos (para mí por primera vez).. Nada de eso importaba.
Fue entonces, cuando un poco antes de medianoche, salieron. El primero fue
Jared (el bajista); lo primero que cruzó en mi mente era “ya… Ya los vas a
conocer”. Infinidad de veces los vi en vídeos y fotos, pero en persona todo
cambia.
Les había hecho unos cupcakes,
unos para la banda en general, y otros para Jared que recién había sido su
cumpleaños. Se los di todos a Jared, además de un regalo que entre todos los
del Team le hicimos a cada miembro. Me agradeció, firmó mis discos, me abrazó,
y me dejó tomarme fotos con él.
Después, vimos que Beau salió por otro lado, rápido fuimos
con él. Le di también su regalo y le dije que dentro había un pequeño
“sombrero” para Rocket (su hija); se alegró y me dijo que seguro lo va a amar.
Igual se tomó una foto conmigo, firmó mis cosas, me abrazó, y al final le
mostré que llevaba una sudadera de su marca de ropa “Golden Hearts Shine Forever”; se alegró y me comenzó a platicar de
una que él tiene parecida.
Fuimos después de esto con Matt (el baterista). Matt, fue el
primer miembro de la banda del cual empecé a ver lo que ponía y a meterme más
dentro de los intereses de cada uno; al igual que con Jared y Beau, le di su
regalo y lo abracé, tomé fotos, y firmó mis discos.
Entonces ahí estábamos, todas esperando junto con Jared y
Matt, a Elliott y a Eric que aún no salían; Beau se fue como siempre, por un Starbucks jaja.
Era ya media noche, estábamos más que cansadas, pero de
repente salieron… Eran Eric (el guitarrista), y Elliott (el guitarrista
rítimico y.. Aun cuando todos son mis miembros favoritos, él es para mí, mi
favorito favorito). La mayoría fueron con Eric, yo, me acerqué con Elliott.
Al llamarlo, me dijo “¡Hola!, ¿cómo estás?” y en seguida le
di su regalo, él me dijo “oh, come,
please, give me a hug! Thank you so much”. Yo no lo podía creer… ¡¡¡Estaba
abrazando a Elliott Gruenberg!!! Se tomó fotos conmigo, me firmó mis cosas, y
platiqué con él un rato, él estaba muy emocionado ya que, era su primera vez de
toda la vida en México. Lo abracé, y le dije que nos veríamos al día siguiente.
Por último, fui con Eric y ese pelirrojo es muy alegre, en
verdad. Igual de lindo que los demás, me firmó todo lo que quería y me abrazó y
se tomó una foto conmigo.
Me fui a mi casa aún en shock, no podía creer que había
conocido a mi banda favorita… Por los que había estado esperando 5 años.
Al día siguiente, después de un rato de tráfico, llegué el Cosa Nostra, el lugar donde sería el
concierto. Entramos y conseguimos lugar casi al frente. Abrieron las bandas
teloneras, y después de un tiempo sólo quedaba esperar a los chicos. Para ese
entonces, nosotras ya estábamos hasta adelante y así fue, de la nada, pasé de
verlos en vídeos de Youtube, o de
escucharlos en mi celular.. A verlos y escucharlos en vivo.
Blessthefall en vivo
deja todo en el escenario; dan toda su energía y todo de ellos. Tocaron
canciones desde su primer hasta su último disco. Entregaron todo de ellos en el
escenario. Beau brincaba, corría, se paraba en la barda, Eric tocando sus solos
increíblemente, Jared dándole ese tono único a Blessthefall con sus screams,
Elliott con una energía y tono increíbles, y Matt dando todo de él tocando la
batería de una manera sobrehumana.
Nunca había llorado en un concierto, ni aún con canciones
que yo relacionaba hacia cosas personales. Todo cambió cuando tocaron “40 days..”. Esta canción, fue la primera
junto con “The Reign”, que escuché de
ellos. Escucharla en vivo sacó todo tipo de sentimientos en mí y no, no tardé
en llorar… de felicidad, algo, que nunca me había pasado por nada ni nadie en
el mundo.
Lamentablemente, no pudieron acabar su setlist, debido a que
el piso del Cosa Nostra se estaba
cayendo, a los fans no nos importaba, pero a la banda y al lugar sí; sólo
faltaron 2 canciones pero en verdad, el tiempo se pasó volando con ellos.
Y así fue, el show había acabado. De repente, salió y subió
de nuevo Elliott al escenario (cada vez que cuento esto lloro, así que podrán
darse cuenta de lo que sentí). Elliott traía dos plumillas en la mano, la abrió
y vio cuál era cuál, una, la recibió Lup, y era de Eric, otra, me la dio en la
mano.. Era la suya. Mi integrante favorito me estaba dando su plumilla en la
mano. Sigo sin tener palabras para describir lo que sentí.
Después de un rato y que la gente se fuera, tuvimos la
oportunidad de pasar con ellos a despedirnos. Tomamos una foto grupal y, la
hora de decirles “hasta pronto” a los chicos había llegado. Yo me despedí
primero de Jared, y al abrazarlo me dijo “Nice
singing” ya que, él estaba frente mío durante el concierto e incluso me
llegó a señalar en una de las partes que él cantaba puesto que me sabía todas y
absolutamente todas las partes de cada canción.
Después, me despedí del pelirrojo de Eric y le dije que
regresaran pronto, él me dijo que en definitivo sí. Lo mismo dije cuando me
despedí de Beau, y me dijo que sin duda alguna. Después, al despedirme de Matt,
le pregunté si le habían gustado los cupcakes que les preparé, él me dijo que
sí, que de hecho sabían a brownies. Y
por último, me tocó despedirme de Elliott. Lo abracé y le dije que por favor se
cuidaran y regresaran pronto; también le pedí si me podía firmar su plumilla, y
lo hizo.
Todos se habían metido y Elliott se quedó platicando con
nosotros un rato más; aun así ya era hora de despedirnos. Al final, le dije que
si había leído mi carta, y me dijo que justo en la mañana lo hizo, me agradeció
mucho por ella (ya que escribí que he visto sus entrevistas y que lo apoyo
mucho, entre otras cosas), platicamos un rato de eso y me agradeció mucho,
además, porque en las fotos que puse en su collage, se pudo dar cuenta que he y
sigo apoyándolos y me agradeció también eso; nos despedimos y nos abrazamos, me
dijo en español “muchas gracias” y nos fuimos.
Salimos del Cosa
nostra, fuimos a un Oxxo por agua, y yo regresé después de un tiempo en
frente del lugar porque ahí me recogerían; vi a los chicos subirse a su
camioneta, y yo sólo esperaba que se fueran ya que, había mucha gente en el
lugar y lo que menos quería era que les pasara algo. Los demás se subieron a la
camioneta, y Elliott se quedó junto con el chico que los ayudaba, a esperar más
equipo. Después de un tiempo, vi que ya se iba, entonces me moví a un lugar más
abierto para que viera mejor cuando pasaran por mí. De repente, volteé porque
sentí la mirada de alguien, y ¡era Elliott! Justo pasó frente a mí y se
despidió de mí moviendo la mano.
Si me preguntan, no hay mejor sensación que conocer a tu
banda favorita; además, saber y confirmar, que aparte de ser excelentes
músicos, son increíbles personas a los que les importa la música y sus fans.
Muchos no habrían accedido a tocar en un lugar como el Cosa Nostra, ellos sí; muchos no habrían aceptado firmar nada
después de vuelos tan largos, ellos sí; muchos habrían esperado más años en
reunir a más gente y así ganar más dinero, ellos no. En verdad no conozco a
muchas bandas, pero de las que sí, puedo decir que Blessthefall tiene un lugar en mi corazón, en todos los sentidos.
Poder verlos por fin en vivo, poder convivir un poco con
cada uno, que mi integrante favorito me tenga (espero) ya identificada.. Son
cosas que no cambiaría por nada, y son cosas de las que me siento orgullosa
decir que soy su fan.
Sólo nos queda trabajar muy duro para a la próxima, traerlos
a un lugar mejor y con más gente que los conozca. Han sido mi banda favorita
desde que los escuché por primera vez hace 5 años, lo han sido y siempre lo
serán. Me dieron la mejor experiencia hasta ahora de mi vida.